29/08/2020 | Noticia

Informe sobre la situación de gobierno de nuestra Obra Social

Informe sobre la situación de gobierno de nuestra Obra Social

Estimadxs afiliadxs:

Nos comunicamos con ustedes para informarles cuestiones importantes sobre el gobierno de nuestra Obra Social. Antes de entrar en el tema específico, creemos conveniente recordar cómo es la estructura de gobierno de la misma.

Estatutariamente la Obra Social está gobernada por un Consejo Directivo compuesto por 9 miembrxs: representantes de sus afiliadxs que componen el sector docente y no docente: 3 docentes (con representación de jubiladxs) y 3 no-docentes (con representación de jubiladxs) y el Consejo Superior (nuestra patronal) tiene representación directa de 3 representantes (sin que haya jubiladxs allí). Lxs consejerxs docentes y no-docentes tienen un mandato de 4 años y se eligen por voto secreto y directo del sector que representan. Lxs Consejerxs que representan al Consejo Superior no son electxs por el voto directo. En las últimas elecciones del sector docente, desde ADUL sostuvimos nuestra propuesta de candidatxs independientes de la gestión patronal. Logramos en esa elección la minoría y por ello nuestra compañera María Silvia Guala ingresó como la representante jubilada al Consejo Directivo. Este Consejo Directivo elige a su Presidentx y a su Vicepresidentx conforme lo establecido en el Estatuto.

El día 11.05.2020 vencido el mandato del hasta entonces Presidente del Consejo Directivo de la OSUNL, Gustavo Mondejar, se procedió a la elección del nuevo Presidente. El representante docente, Eduardo Villarreal, fue electo por 8 votos, salvo el voto de nuestra representante que como correspondía sostuvo su propia candidatura. El Vicepresidente de la Obra Social, representante no-docente, había sido electo durante el año 2019.

Asumida ya su Presidencia del Consejo Directivo, Eduardo Villarreal convocó a una reunión del Consejo para el día 27.05.2020. En esta sesión manifestó su imposibilidad de cumplir el conjunto de todas las funciones propias de su cargo y propone delegar esas funciones, que podemos llamar de gestión, en una “Gerencia General”. Este ejercicio parcial de funciones es ajeno al Estatuto y fue rechazado por nuestra representante y por lxs representantes de lxs no-docentes. Esto motivó un pase a cuarto intermedio y la posterior renuncia de Eduardo Villarreal al cargo de Presidente del Consejo Directivo de la Obra Social pero no así a su carácter de consejero.

El Estatuto de la Obra Social de la UNL y el Reglamento de Funcionamiento del Consejo Directivo de la Obra Social son expresos al mencionar las funciones de los Consejeros, del Presidente y del Vicepresidente. Desde el momento mismo de la creación de nuestra Obra Social, se viene forjando un plexo normativo que permite un funcionamiento regulado y previsible.
Este cuerpo normativo establece la forma en que se cubrirán las vacantes ocasionadas en los cargos del Consejo Directivo. Expresamente se establece que ante la ausencia del Presidente (por licencia, renuncia o fallecimiento), asumirá el Vicepresidente. Lo que corresponde es que de manera urgente el Vicepresidente actual reemplace al Presidente saliente por el resto de su mandato y se designe un/a nuevx Vicepresidentx del Consejo Directivo por igual período.

Han pasado ya 3 meses desde la última reunión del Consejo Directivo que pasó a cuarto intermedio, sin que se vuelva a sesionar para darle un cierre a la misma. Esta situación paralizó el funcionamiento del Consejo. Ello deviene absolutamente inoportuno en el particular contexto que nos encontramos atravesando por la situación epidemiológica producida por la COVID-19 que transformó las condiciones de los sistemas de salud; cuando necesitamos una obra social que nos dé rápidas y efectivas respuestas a nuestros problemas de salud el Consejo Directivo que es su órgano de gobierno dejó de funcionar.

La estructura orgánico-funcional de nuestra obra social es financiada directamente con nuestros aportes y es nuestro deber cuidar y exigir que las medidas de Gobierno que se adopten sean acordes con un sistema solidario, en pos de mayores y mejores prestaciones, sin desconocer la importancia de la sostenibilidad económica de la misma. Por esta razón entendemos que una Gerencia General es inconveniente no sólo porque modifica la estructura estatutaria de gobierno sino que implica un gasto desmedido que tendremos que sostener con nuestros aportes. Nuestra Obra Social cuenta con mecanismos para hacer frente a la particular situación de pandemia que atravesamos, sin perjudicarnos, y lejos de la situación mencionada, se debe redoblar el esfuerzo e incrementar el trabajo de quienes tienen la responsabilidad de gobernarla y gestionarla.

La posición de ADUL es, como ya lo hemos expresado, defender nuestra Obra Social y por ello exigimos la normalización del funcionamiento del Consejo Directivo y la adopción inmediata de medidas que den respuesta a las particularidades y urgencias de nuestro sector en este momento tan particular. Esta posición ha sido reiteradamente expuesta por nuestra representante ante los miembros del Consejo Directivo.

Una vez normalizado el funcionamiento del Consejo Directivo, proponemos la adopción de medidas urgentes a saber:

  • Adecuación de los mecanismos de atención al público para afiliadxs con dificultades para acceder desde la virtualidad a lxs servicios de la Obra Social.
  • Inmediata resolución del corte de las prestaciones de oftalmología y tratamiento de un Proyecto Especial de cobertura oftalmológica por dificultades ante la exposición prolongada a las pantallas.
  • Normalización y puesta al día del sistema de “Reintegros” a los Afiliadxs.
  • Inmediata normalización de la Cobertura en Medicamentos y urgente análisis y modificación del nuevo sistema de cobertura y del vínculo con el Colegio de Farmacéuticos.

Cuidar nuestra obra social es responsabilidad de todxs nosotrxs. Tu compromiso es la base del nuestro.

Fraternalmente/Sororamente

Comisión Directiva