Ayer lunes 28 los y las docentes universitarixs y preuniversitarixs paramos en la UNL y en el país.
La medida de fuerza fue motivada por el deterioro salarial de la docencia universitaria y preuniversitaria y por la falta de reconocimiento de los gastos ocasionados por el trabajo en la virtualidad. El paro docente se desarrolló mediante un apagón virtual o desconexión y actividades de visibilización.
A través de la media de acción directa se reclamó una urgente recomposición salarial, el reconocimiento de los gastos ocasionados por la enseñanza virtual, la estabilidad de las y los docentes interinxs y contratadxs. La docencia también se manifestó en defensa de las obras sociales universitarias y por mayor presupuesto para las Universidades Públicas.
Compartimos el balance del paro que realizó nuestro Secretario General Oscar Vallejos:
El paro de 24 horas que realizamos en la virtualidad fue bueno en términos del nivel de adhesión de la docencia universitaria y preuniversitaria de la UNL y de presencia en los medios.
El trabajo en los medios buscaba el objetivo de visibilizar nuestra situación: llegamos al paro nacional por cuestiones salariales, reconocimiento de gastos por trabajo en la virtualidad y condiciones de trabajo.Nuestra patronal que está compuesta por el Ministerio de Educación a través de la Secretaría de Políticas Universitarias, el CIN y la UNL no está escuchando nuestras demandas. No abren la mesa de negociación salarial y no reconocen los gastos. Este es un aspecto que hay que evaluar y recién hoy lo sabremos porque el paro tiene tres zonas de eficacia. Una es el nivel de adhesión y si la voluntad expresada por quienes sostenemos cotidianamente el gremio es capaz de convocar la voluntad mayoritaria de la docencia universitaria y preuniversitaria. Otra es cómo se coloca el conjunto de nuestros reclamos en la esfera pública para movilizar el apoyo ciudadano en un contexto difícil: no hubo ningún medio que no me preguntara si entendíamos el contexto en el que estábamos llevando adelante nuestros reclamos, de manera que tuve que desarrollar una línea argumentativa para explicar las razones y las urgencias de nuestro reclamo. La tercera zona que entiendo es la más importante es el impacto en las patronales porque hacemos paro para impactar en las patronales. Ahora tenemos que ver el efecto performativo del paro en las patronales.
Es parte del trabajo de la dirigencia sindical articular esas dimensiones para encauzar una fuerza colectiva y canalizarla para que la patronal responda a nuestras demandas. Esta semana tendremos el Plenario de Secretarías Generales que evaluará el plan de acción gremial a nivel nacional y en tanto el paro es un dispositivo productor de efectos tenemos que poder entender esos efectos y desde allí ser estratégicos para conquistar nuestros reclamos que son justos y urgentes.